Hace unas semanas leí una definición sobre la palabra moda, muy insignificante para muchos, esta era definida como todo aquello que se torna muy popular y es buscado por un sector de la sociedad o por toda ella, durante un período largo o corto, en un lugar, todo producto establecido y adoptado, que prevalece sobre los otros de la misma especie, en las preferencias y decisión de compra de los consumidores.
Estoy en desacuerdo con ello, en mi opinión, la moda es un lenguaje, una manera de comunicarse. Es un medio de comunicación visual. Uno se pone una cosa y no otra. Es por eso que el mayor valor de un diseñador, tanto nuevo como consagrado, es la imaginación, la individualidad y la creatividad. El que no tiene miedo a decir lo que piensa se expresa a través de la ropa. A su vez es un estado de ánimo, ¿Quién no se ha levantado un día con la autoestima por las nubes, ha abierto el armario y se ha dicho a si mismo "hoy voy a comerme el mundo"? A través de la moda podemos radiar felicidad, o demostrar al mundo el mal día que estamos pasando.
Debemos separar la moda de la vestimenta.
Dos términos muy relacionados
pero con miles de diferencias de por medio.